Ave Maria: Un Lugar Donde el Espíritu Llama y Transforma.
Ave Maria no es solo un lugar, es un llamado del Espíritu Santo. Muchos de los que hoy viven aquí jamás imaginaron que sería posible—las barreras eran reales: económicas, laborales, geográficas. Pero algo más fuerte los atrajo. Esa voz suave pero insistente del Espíritu abrió caminos donde no los había. Llegaron, y aquí, en este pueblo profundamente católico, encontraron una transformación espiritual que cambió sus vidas. En Ave Maria, la fe no se vive en soledad: se respira, se comparte, y se convierte en la razón de ser.